A ti.
Arribaré contigo al aroma
de la luz, que a la luz sólo en amor
se llega, y, contigo, soy lleno de sentido.
Entiendo que la vida al dar la mano
se entiende, y se entra a la verdad
de la muerte. Sólo muere quien amas;
el adiós y la pena, ay, las nubes.
Sin embargo,
en la canora voz de la memoria,
colibrí murmurante, permanece.
Sólo en el amor el arrebato
hermoso del anhelo, que surca,
más allá de los huesos y del polvo
de los huesos, la luz que nos conforma.
La eternidad oculta, contigo,
el dulcedumbre aroma de la muerte.
Arribaré contigo al aroma
de la luz, que a la luz sólo en amor
se llega, y, contigo, soy lleno de sentido.
Entiendo que la vida al dar la mano
se entiende, y se entra a la verdad
de la muerte. Sólo muere quien amas;
el adiós y la pena, ay, las nubes.
Sin embargo,
en la canora voz de la memoria,
colibrí murmurante, permanece.
Sólo en el amor el arrebato
hermoso del anhelo, que surca,
más allá de los huesos y del polvo
de los huesos, la luz que nos conforma.
La eternidad oculta, contigo,
el dulcedumbre aroma de la muerte.
Abraham Peralta Vélez